Obrazy na stronie
PDF
ePub

CARTA II.

DEL OFICIO DEL MESÍAS, Y de los fines

DE SU VENIDA AL MUNDO.

El hombre, criado por las manos de un Dios

eterno, que es la fuente y el pozo de toda la perfeccion, no puede ser ménos que perfecto: así nos lo Cap. 1. v. 13. declara el Profeta Habacuc que del Omnipotente no puede salir nada malo. ¿En qué consistirá pues que observemos en todos los hombres tantos vicios é imperfecciones? Las inclinaciones de nuestro corazon, nuestras pasiones desde nuestra niñez, suponen en nosotros una naturaleza corrompida. Aquel que se haya estudiado á sí mismo, y observado con contemplaciones imparciales su propio corazon, no puede negar este punto visible; pero sé que hay hombres cuyo amor propio y cuya soberbia (que en verdad es el testigo mas irrefragable en favor de nuestra proposicion) los ciegan de tal modo, que exâltan la naturaleza humana en su presente estado hasta las nubes, y creen llegar con solas las fuerzas de ella á la suma felicidad que buscan, no

sé dónde, porque tampoco ellos lo saben; pero estos hombres ó no han exâminado jamas su propio corazon, y habláron (en sus obras que llaman filosóficas) á bulto, ó su fantasia y natural soberbia los ha cegado de manera que no observan sus mismas pasiones y faltas. Este es el gran escollo en que naufragan todos los propagadores de la Religion natural, que hablan del hombre como si hubiese perseverado en el dichoso estado en que

[merged small][ocr errors][merged small][ocr errors][merged small]
[ocr errors]
[ocr errors]

les y conseqüencias firmes, y fundadas por sus propios razo,,namientos, alcancen el arcano de ,,la Religion." ¡Qué pensamiento tan sublime es este que Rousseau ha sacado de sus observaciones! ¡y qué conseqüencia tan natural no sacó nuestro filósofo de la obsIcuridad y debilidad de la razon natural del hombre! ¿No se contradice el ciudadano de Ginebra en esta lógica suya? por cierto que sí. Pues si la razon natural es obscura y debil, ¿cómo ha de ser capaz de iluminarse y fortificarse por sí misma sin auxilio exterior? pero no es esta la única contradicion de Rousseau; este hombre declaró en

este mismo tomo III de su obra, que hemos citado arriba, que los primeros fundamentos de la Religion nacen con el hombre: sin embargo quiere que por ser la razon natural obscura y débil, debemos dexarle con aquellos solos principios de la Religion que nacieron con él, sin hablarle nada de ella hasta que tenga veinte ó mas años, para que se obscurezcan y debiliten mas en él estos principios, que son esenciales, pues nacen con él. Si la razon natural es obscura y debil en los hombres, como confesó Mr. Rousseau, ¿cómo será en un jóven que tiene delante mas exemplos de la obscuridad y de la debilidad, que de la virtud? pero no es creible que haya padres tan crueles, tan bárbaros é ignorantes, que sigan la doctrina de Rousseau, abandonando á sus tiernos hijos á sus propias pasiones, ofreciéndolos al ídolo Moloch: entre tanto Mr. Rousseau llama á su Religion natural la Religion del juicio, y el culto sensible.

(a) Emil. tom. III. pag. 187.

Dios le crió; pero jamas como es efectivamente * La corrupcion general de la naturaleza humana, fruto del pecado original, nos confundió la razon natural de tal manera, que por ella sola, sin otra guia mas segura, jamas serán los hombres capaces de saber con certeza lo que es justo, ni de hallar la misma Ley natural, que fue impresa en nuestros corazones por el Autor de nuestro ser. Los incrédulos filósofos de este tiempo (pues tambien entre los Judíos se hallan) confunden la Ley natural con la razon, y creen que ámbas son una misma cosa, siendo tan distintas como la perfeccion de la imperfeccion: la primera es siempre la misma; pero la segunda fue corrompida por el pecado, de tal modo que apenas se pueden hallar dos personas entre los mayores sabios de los filósofos que jamas hubo, que pensasen lo mismo el uno que el otro sobre la Religion, pues lo que uno de ellos aprueba, el otro desaprueba. Las innumerables obras de los filósofos Griegos y Romanos que tenemos en las manos, demuestran claramente esta verdad, y no pocas pruebas se pueden sacar de las

2 Basta leer lo que escribió Mr. Helvecio sobre la Religion natural. ,, La revelada, dice, nos propone „, penitencia, y así incita al peca„do, porque se sabe que hay un ,, remedio; pero la Religion natu,,ral no propone remedio alguno, ,,y obliga á practicar la virtud, ,, pues faltando en ello, no se pue,, de resarcir." ¡Buen razonamien

to! es cierto que Mr. Helvecio no entendió lo que manda la Religion revelada con la penitencia, y dixo de la Religion natural lo que es contrario á la naturaleza humana, é imposible de executar. Así hablan generalmente todos los autores á la moda, defensores de la Religion natural, que no tienen religion alguna.

producciones de Bayle, de Helvecio, de Voltaire, de Rousseau, y otros varios de los modernos defensores de la Religion natural 3, tan admirados entre los incrédulos de todas las naciones.

Aun es mas la disonancia que se halla entre la conducta y la doctrina que enseñan en sus escritos los enemigos de la Religion revelada, pues alaban la virtud que no conocen, y hablan lo contrario á lo que obran. ¿Correspondió la conducta de Sócrates, á quien elogiáron tanto los antiguos por sus conocimientos filosóficos, y á quien los modernos exâltan hasta el grado de la suma perfeccion; correspondió, digo, su conducta con las sublimes ideas que tuvo del eterno Ser y de su perfeccion? Por cierto que no. ¡Con qué confusion se lee la historia de su vida, y las apologías escritas en su favor por sus discípulos contemporáneos y mayores amigos! ¡Qué dolor causa su último pensamiento y conducta del todo supersticiosa, mandando á su

3 No es el pensamiento de Mr. Rousseau (a), citado en la nota primera de esta Carta, suyo propio, sino de Platon, que mas de dos mil años há le enseñó (b); pero Josepho probó justamente lo contrario: y Rousseau, que siguió á Platon en este pensamiento, se contradice á sí mismo, pues dice (c): On à beau vouloir établir la vertu par la raizon seule, quelle solide base peut on lui donner? Philosopbe, tes loix morales sont fort

[ocr errors]

belles, mais montre m'en......de grace
la sanction.....,,En vano se inten-
,, ta establecer la virtud por la sola
razon: ¿qué fundamento sólido
, se le puede dar? Filósofo, tus le-
,, yes morales son buenas; pero en-
„séñame...., te ruego, su sancion."
¿No es esto contrario á lo que el
mismo Rousseau dice un poco án-
tes, pues declara „, que los jóvenes,
„por su propia experiencia, pue-
,,den hallar la Religion natural sin
,,instruccion y auxilio exterior ?"

(a) Emil. ibid. (b) V. Iosepho contra Apion, lib. 2. (c) Ibidem. TOMO II.

F

[ocr errors]

amigo Criton pagar al ídolo de Esculapio el gallo que le ofreció por sacrificio! ¿Con qué pueden justificar sus modernos defensores una conducta tan contraria á las máximas filosóficas del mismo Sócrates, que dan á entender que conoció al verdadero Dios? ¿Alegarán acaso que este hecho fue solamente practicado por él para descargarse de la culpa que le atribuyó Meliton, pero que Sócrates en su corazon estaba persuadido de lo contrario? siendo esto así, seguramente no es ménos despreciable el filósofo griego por su hipocresía, por el mal exemplo que

[merged small][ocr errors]
[ocr errors]

su conducta y su moral...." No pensáron así los Padres de los primeros siglos de la Iglesia, que sin duda tuvieron mejores noticias así de la filosofia como de la conducta de Sócrates. San Cirilo (a) y Teodoreto (b) declaráron con palabras bien claras, sobre los escritos originales de los discípulos del filósofo griego, que fue culpable de la mayor intemperancia, de supersticion, de orgullo y de soberbia, no solo durante su vida, sino tambien en la hora de su muerte; pero si el Genio de Sócrates era verdaderamente un

ángel, ¿cómo no le corrigió, y le dexó ir al Pireo á adorar á Diana, y á aconsejar á Xenofonte que fuese á consultar el oráculo de Delfos, y mandar un poco ántes de su muerte ofrecer el gallo prometido á Esculapio? ¿por qué no le avisó dicho ángel de luz, que los lugares infames é indecentes que freqüentaba durante su vida, sin embargo de tener dos mugeres como propias, no es ni puede ser agradable á la eterna perfeccion? Pero Mr. Dacier no dexó por eso de favorecer á Sócrates con una apología, aunque sin fundamento alguno, pues dice ,, que los pasages que hemos citado arriba contra Sócrates no son hechos históricos ,, verdaderos, sino alegorías y fábulas (c)"..... apoyándose sobre la autoridad de Teodoreto, el qual, segun Dacier, estuvo mejor instruido en la historia de Sócra

[ocr errors]
[ocr errors]
[ocr errors]

(a) Lib. 6. pag. 185. contra Iuliano. (b) Disc. 12. pag. 673. (c) Nota ad Pbed. pag. 325.

« PoprzedniaDalej »