Colección de poetas españoles, Tom 3Impr. Real, 1805 |
Kluczowe wyrazy i wyra¿enia
abrasa afecto ageno agora alabanza Alcides alegre aliento alma almas amor Angel apercibe arte Asteria Augusto ayre Bartolomé Cancion canto celestiales cielo comun corona cuya derriba despojos despues dexa diestra dió divino dixo docto dulce eloqüencia enxuto EPIGRAMA Epístola espanto esperanza esposa esquadrones estilo estrellas eterno exemplo exercicio exército Fabio fiel fiero Filipo flores Francisco de Rioja fuego fuerte fuerza furor gente gloria gloriosa Grecia halla Homero honor humana humildes Huye ingenio justo lágrimas Leonardo llanto llora Luzbel madre Menfis mira mortal muerte mundo musas nave ojos orbe padre Partenope pecho piélago Piérides Pindaro plectro próspera púrpuras de Tiro qual quan quando queda quiero reposa resplandor Reyno ruïna sacra santa Scita seno soberbio Soneto sosiego suena suerte sugeto tambien templo Tesalia texe tierno tierra tirano trofeos turba Ufano vencedor vencer venerable verdad versos virtud vitoria viva voces vuelo vulgar yace zelo
Popularne fragmenty
Strona 183 - El ánimo plebeyo y abatido elija, en sus Intentos temeroso, primero estar suspenso que caído; que el corazón entero y generoso al caso adverso Inclinará la frente antes que la rodilla al poderoso.
Strona 188 - Mas no podrás negarme cuan forzoso este camino sea al alto asiento, morada de la paz y del reposo. No sazona la fruta en un momento aquella inteligencia que mensura la duración de todo a su talento.
Strona 175 - En paja muelle entonces recostado (próspero lecho) el gran ratón yacía, dueño de aquel vivar afortunado; que royendo unos tronchos, se abstenía de lo bueno y repuesto, porque el hijo se acreditase con la demasía; al cual, riendo, el cortesano dijo: ¿No me dirás, amigo, por qué pasas la vida en este mísero escondrijo?
Strona 191 - Enamorado de la yerba y flores, Y por la libertad del pasto tierno El cándido licor olvida y deja Por quien hizo á su madre mil amores : Sin conocer temores, De la florida primavera bella El vario manto huella Con retozos y brincos licenciosos, Y pace tallos tiernos y sabrosos. Mas ¡ ay ! que en un otero Dió en la boca de un lobo carnicero, Que en partes diferentes Lo dividió con sus voraces dientes, Y á convertirse vino En purpúreo el dorado vellocino.
Strona 186 - ¿Piensas acaso tú que fue criado el varón para rayo de la guerra, para sulcar el piélago salado, para medir el orbe de la tierra y el cerco donde el sol siempre camina?
Strona 185 - Como los ríos, que en veloz corrida se llevan a la mar, tal soy llevado al último suspiro de mi vida. De la pasada edad ¿qué me ha quedado? ¿O qué tengo yo, a dicha, en la que espero, sin ninguna noticia de mi hado?
Strona 184 - Busca, pues el sosiego dulce y caro, como en la oscura noche del Egeo busca el piloto el eminente faro ; que si acortas y ciñes tu deseo, dirás : «Lo que desprecio he conseguido ; que la opinión vulgar es devaneo...
Strona 184 - Lo que desprecio he conseguido; Que la opinion vulgar es devaneo. » Mas precia el ruiseñor su pobre nido De pluma y leves pajas, mas sus quejas En el bosque repuesto y escondido, Que agradar lisonjero las orejas De algun principe insigne, aprisionado En el metal de las doradas rejas.
Strona 34 - O tú siempre dichosa pecadora, La que fuiste por tal con grande espanto Del vulgo con el dedo señalada ! Tus lágrimas con Cristo pueden tanto, Que la menor lo enciende y enamora, Y á la culpa mayor dexa anegada.
Strona 92 - Nuestra patria no quiere, ni yo quiero Abortar un poema colecticio De lenguaje y espíritu extranjero: Pues cuando me quisiera dar propicio Maron para su fábrica centones, ¿Quién sabe cuál surgiera el edificio? Con mármoles de nobles inscripciones, (Teatro un tiempo y aras) en Sagunto, Fabrican hoy tabernas y mesones.